Una de las secuelas que ha dejado la pandemia, es el incremento del número de bajas médicas de trabajadores y las solicitudes de nulidades en los despidos.

¿Podemos despedir a un trabajador si está de baja?

Desde mi punto de vista, considero que poco se habla – pues es un tema sensible–, pero hay mucha facilidad para que te den la baja, y es una realidad. Pero lo peor no es este coste que conlleva para las empresas, si no que se están utilizando las bajas médicas como arma de blindaje por parte de los trabajadores hacia las empresas en caso de despido o si no están conformes con algo, por ejemplo, ante un posible cambio de horario.

Hablo de mi experiencia personal, y estoy convencida de que no soy la única que se está encontrando con esto. La gran mayoría de despidos que ejecutamos tienen bajas de por medio, y te acabas encontrando siempre, solicitudes absurdas de nulidades
(con indemnizaciones por daños morales) y subsidiariamente improcedencia. Esto antes no sucedía, la nulidad, es lo que es, la consecuencia mas grave del ordenamiento jurídico, y por tanto su uso estaba limitado.

Este abuso de bajas (y que considero que muchas no son reales, es mi opinión) y de nulidades hace que se esté restando credibilidad a las bajas de incapacidad temporal reales, así como, una clara desnaturalización y vaciado de contenido de lo que es un una autentica nulidad en un despido.

Estas bajas y posteriores solicitudes de nulidades están siendo un claro medio para extorsionar a las empresas, lo digo claro, y como trabajadora, no me parece justo para las Pymes.

En este sentido, los asalariados lo tienen fácil. Van al médico, piden la baja y si despides o ejecutas, por ejemplo, una modificación sustancial, acuden al ir al juzgado a pedir una nulidad con una indemnización adicional de 50.000€ y ya, subsidiariamente, improcedencia. Esto es un problema muy serio y considero que no se le está dando la importancia que tiene, pues lo que antes era improcedente con 33 dias y ya está. Sin embargo ahora, las empresas, con miedo a encontrarse con una nulidad y sus consecuencias, acaban cediendo y abonan cantidades adicionales que no proceden.

Hay mucha inseguridad jurídica en esto, principalmente por las normas que están saliendo de la pandemia, las cuales son interpretables, así como por los distintos pronunciamientos de los Tribunales Superiores de Justicia. El tiempo lo dirá.

Carmen Sánchez

Abogada