Son muchas las ventajas de llevar adecuadamente la contabilidad de autónomos y empresas. Además de tener mayor control de esta y de disponer de más información a la hora de crear planes y estrategias para aumentar su rentabilidad, tenemos que destacar las siguientes ventajas:

• Localización de facturas que no han llegado con la posibilidad de reclamarlas y, por lo tanto, de desgravarnos el IVA y el gasto en el Impuesto sobre Sociedades.
• Identificar la necesidad de gastos a tiempo para minorar la tributación en el Impuesto sobre Sociedades o de postergar la facturación prevista con el mismo fin, no incrementar la base imponible del impuesto.
• Mayor tiempo de reacción ante la posibilidad de errores (como podría ser la duplicidad de pagos o cobros o la falta de estos)
• Estar al tanto de los saldos con clientes y proveedores e identificar si hay que llevar a cabo alguna acción para corregir comportamientos anormales.
• Identificar si se tiene un fondo de maniobra adecuado para no llegar a tener problemas de liquidez a la hora de cumplir con nuestras obligaciones de pago a corto plazo con nuestros acreedores.
• Facilidad para solicitar y conseguir un préstamo bancario en el momento que se necesite.
• Y lo más importante, no pagar impuestos de más por falta de documentación, información…

Y no nos podemos olvidar de ¡tener contentos a nuestros asesores!, que agradecerán no tener una avalancha de trabajo mayor a la necesaria en épocas de presentación de impuestos y que verán reducida muy notablemente la posibilidad de errores.