La carta de despido es el elemento más importante en la estrategia de un despido y muchos abogados y asesores la descuidan, remitiendo constantemente sus clientes unas cartas que no cumplen los requisitos que marca la ley. Estas suelen ser cartas genéricas e imprecisas sacadas de internet y que apenas ocupan media cara de un folio. El hecho de hacer mal la carta ya condena a la Empresa y sin posibilidad de discusión a tener que abonar la indemnización máxima, es decir, la improcedencia (cuando no lo sea la nulidad).

Así, la carta es el elemento más importante en los despidos por dos razones básicas:

1. Si la carta de despido no está bien redactada, está todo perdido; el despido va a ser improcedente. Y ello independientemente de que tengamos razón o de que tengamos muchas pruebas para demostrar el motivo del despido. Todo esto es indiferente, con toda seguridad una carta mal redactada te hace perder el despido y tener que abonar la cantidad máxima de indemnización.
2. No vamos a poder alegar nada adicional a lo que conste en la carta y es nuestra defensa en el juicio. Por este motivo cuando se prepara la carta siempre hay que pensar en un posible juicio, cómo lo vas a plantear y que pruebas vas a llevar para defender lo que estás diciendo en la carta.

Por tanto, cuando decimos que la carta debe estar bien redactada, nos referimos a que se deben cumplir los requisitos que prevé el Estatuto de los Trabajadores: que sea concreta, clara, precisa y no genérica, con un adecuado detalle cronológico de los hechos en los que nos basamos, explicando cada uno de ellos con la máxima concreción, dando nombres de los testigos, haciendo referencia a las pruebas que llevaremos al juicio etc., por ello insistimos en que hay que hacer la carta pensando en el juicio, la carta que redactes va a ser tu defensa.

Las cartas, además, por raro que suene, van “al peso”. Las cartas de una hoja, con toda seguridad van a ser improcedente por falta de forma, hay que explicar todo como hemos dicho y previamente hay que hablar con el cliente de los motivos del despido y ver las pruebas de las que disponemos.

Por tanto, a las cartas de despido hay que dedicarles mucho tiempo y debemos tomarnos todo lo necesario para redactar y preparar bien toda la estrategia y la prueba, si lo anterior lo tenemos claro y lo llevamos a cabo, tenemos muchas posibilidades de ganar el juicio.  

En nuestro despacho, llevamos muchas empresas de asesoría fiscal, laboral y contable, y aunque no seas cliente habitual, podemos encargarnos de la solicitud y de la gestión del expediente, incluyendo el contacto y la negociación con los sindicatos, Si estás pensando en implantar este sistema de trabajo, ¡¡¡¡PREGÚNTANOS sin compromiso!!! o reserva una consulta de pago con nuestros abogados expertos AQUÍ

CARMEN SÁNCHEZ SÁNCHEZ